En cuanto al problema del material en sí mismo [...] puede ser considerado de una manera autónoma en la medida en que el artista-pintor debe desarrollar su sentido de la materia, debe sentir las cualidades inherentes a cada material que por su propio carácter condicionan la construcción del objeto. Es el material el que dicta la forma al artista, y no a la inversa. La madera, el hierro, el vidrio, etc., determinan construcciones diferentes. En consecuencia, la organización constructivista del objeto pasa por el material: el estudio de los diversos materiales constituye una cuestión autónoma e importante.
NIKOLAI TARABUKIN